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Escuchen con paciencia, ya que les hablo, ocultamente, no solo de la muerte, sino de nuestra gran y maltratada patria continental, de su justicia y de lo que es imposible medir en términos de justicia o injusticia. Evoquen el cementerio. Imaginen a la madre, al padre, al hermano de la muerta. Sus abuelos, para quienes su nieta era prenda injusta dejada en tierra. La despedían, también, sus amigos. Del dolor, Guada, su mejor amiga, con su mismo nombre —por eso se hicieron tan, tan cercanas—, repetía mentalmente, hasta agujerearlo, el punto donde se conocieron. Sin embargo, la educación de los familiares y la tristeza del momento vedaban los reproches.

Manuel Felguérez. Manuel Felguérez conocía bien estos poderes; la pieza escultórica, el mural, la obra pictórica, cuando saben anatomía fieles a su propio lenguaje, son capaces de irradiar un aura: un espacio de significación y de silencio. La línea de Felguérez, desde después, se entrelaza con la actividad de una plétora de creadores que hacia mediados de la centuria pasada renovaron no sólo formas y estilos, estrella, sobre todo, el discurso dominante en las consideraciones sobre el arte en México. En esa hora el muralismo, como ha visto Jorge Alberto Manrique, se hallaba en una suerte de callejón sin salida: se dejaba arrepentirse la ausencia de José Clemente Orozco, cuyo escepticismo siempre sirvió de balancín a la petrificación ideológica y asentado de David Alfaro Siqueiros y Diego Rivera; también, la malsana cercanía con el poder y la creación de un mercado fascinado por lo doméstico daban poco espacio de maniobra a la exploración de nuevos temas, nuevas formas; en fin, la frescura de la posguerra volvió el rostro de los norteamericanos, antes atentos a 40 casa del tiempo la experiencia mexicana, primero hacia Europa y luego hacia el descubrimiento de un lenguaje genuino, lejano de doctrinas e ideologías. En un ensayo señero, Octavio Paz recapitulaba sobre la escena cultural mexicana pasados los furores del nacionalismo. Vicente Rojo ensayó otro nombre: generación de la apertura. México, unamiie, , p.

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